Solo en tus sueños

Ella y yo, tumbados de lado mirándonos a los ojos con sonrisas tímidas pero complacientes. En una cama de 2 por 1,5, con el espacio necesario, oscuridad tenue y tiempo de sobra.

-¿Por qué me miras así? -dijo ella.
-Porque mirar estrellas de cerca enamora.
-No seas tan romántico, que al final dan ganas de vomitar arcoíris.
-Eso es porque tú no eres capaz de ello, pero te gusta.
-¡¿Cómo que no puedo ser romántica?! ¿Qué te juegas?

Un silencio, segundos para pensar en muchas opciones y poder sacar un posible As.

-Me juego lo que tú quieras que sea frustrante para mi, pero que no valga dinero y viceversa con la apuesta que yo te haga. -contesté.
-Vale, de acuerdo ¿pero cuál es tu apuesta?
-A que soy capaz de excitarte con tocarte solo un pezón durante un máximo de 5 minutos.
-Jajajajajajaja, ni de coña. ¿De qué vas?
-Has dicho que apueste algo, apuesto algo difícil o casi imposible y vas a ser tú quien diga que tengo que hacer en caso de no ganar.
-Ya claro...
-Oye si tú no eres capaz de ser romántica conmigo, tendrá que poner una foto de los dos de perfil en twitter durante un mes.
-¡Estás loco!
-¿Ves? Te frustra pero tampoco te parece realmente algo demencial, lo puedes revertir al cabo de un mes, no cuesta dinero y tampoco te digo que te des un paseo por el parque sola ahora, que podría. :P
-En fin, pues sí tú no puedes hacer eso que dices, tendrás que darme un masaje de espalda durante un mes todas las veces que estemos juntos.
-¿Queeeeé? Eso es de mayor esfuerzo que lo mío.
-Ni gastas dinero ni...
-Ya, ya, has usado las normas en mi contra, maldita.
- ;) Solo lo he equilibrado.

Ella se acercó y lo rodeó con sus brazos por la espalda de él, acercó sus labios al oído y...

CONTINUARÁ...