Las relaciones, el vestuario, el jardín, las redes sociales... todas acaban igual, llena de mala hierba. Llega un momento en el que tienes que cambiar de ropa dejando la vieja para beneficencia o trueque y comprando nueva... en las redes sociales silenciando y seguramente bloqueando... y en las relaciones, bah, en las relaciones es lago más complicado pero pinta igual.
Hay veces en las que distanciarse no es malo, si no necesario para volver a retomar ese punto y coma, ojo que no me refiero en una relación de pareja, si no en relaciones de amistad, de familia, de trabajado... aunque es muy difícil de que si una relación de este tipo no funciona bien y hay que podar cada X tiempo, al final habrá que arrancar las raíces para estar bien, y dolerá, ya lo creo que dolerá. El ser humano es masoquista aunque sexualmente no lo sea, no al menos la mayoría de la población mundial.
No nos es suficiente con arrancar las malas hierbas, hay que podar, mimar, cuidar, etc. Ojalá fuera tan sencillo, pero es que en una relación van un mínimo de dos personas y al ser algo recíproco no es tan fácil la situación al menos para quien estuviera sol@.
El caso es que un día te despiertas, te levantas con mala hostia y te das cuenta de que Adrián o Alba no son esas personas con las que te sientes bien, que en vez de ayudarte, te están envenenando porque por Z motivos todo se ha ido al traste, entonces es cuando llega el momento de arrancar las raíces.
¿Pero, cuánto tiempo se tarda?
No hay comentarios:
Publicar un comentario